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Los métodos de interpretación teatral son las técnicas que utilizan los actores y actrices para crear un personaje y expresar sus emociones, pensamientos y acciones en el escenario. Existen muchos métodos de interpretación teatral, pero aquí solo mencionaremos algunos de los más conocidos:

 

El diablo cojuelo de Rhum&Cia fotografía David Ruano
Foto de la obra Cabezas de Cartel de Perigallo Teatro

¿Qué otros métodos existen? Hay muchos más, como el método Meisner, el método Chejov, el método Suzuki o el método Viewpoints. Cada uno tiene sus características, sus ventajas y sus inconvenientes. Lo importante es que el actor o actriz encuentre el método que mejor se adapte a su forma de trabajar y a su personalidad.

Los farsantes, fotografía Luz Soria
Jango-Edwards-foto-de-©IanPatrick

– El método Stanislavski: desarrollado por el director y actor ruso Konstantín Stanislavski, se basa en la observación de la realidad, la memoria emotiva, la concentración, la relajación y la imaginación. El objetivo es lograr una interpretación naturalista y verosímil, que haga creer al público que lo que ve es real.
– El método Strasberg: creado por el director y actor estadounidense Lee Strasberg, se inspira en el método Stanislavski pero le da más importancia a la memoria emotiva. El actor o actriz debe revivir experiencias personales que le provoquen las mismas emociones que el personaje, y así poder transmitirlas al público.
– El método Grotowski: ideado por el director y actor polaco Jerzy Grotowski, se centra en el trabajo físico del actor o actriz, que debe explorar los límites de su cuerpo y su voz. El método Grotowski busca una interpretación esencial y minimalista, que prescinde de elementos escénicos como el vestuario, el maquillaje o la iluminación.
– El método Brecht: propuesto por el dramaturgo y director alemán Bertolt Brecht, se opone al naturalismo y busca una interpretación distanciada y crítica, que haga reflexionar al público sobre los problemas sociales. El actor o actriz debe mostrar que está representando un personaje, romper la cuarta pared y utilizar recursos como el canto, la música o las proyecciones.